Hay dos clases de retórica, cronológicamente consecutivas:
a) De perfil político, de la ciudad, instrumento de acción que emplea el ciudadano en Atenas S.V y IV a.C.
b) De perfil escolar, del ciudadano del mundo (no ya el ciudadano de la pólis o ciudad-estado, organización política que no existe a partir del S. IV a.C.) no es políticamente libre, ni participa en política de la ciudad, es individual, sirve para conocer y practicar normas racionales de una filosofía ética, para tener una formación humanística de conocimientos filológicos y literarios. Conocida por los romanos y es la que se transmitía por esta vía a todo el mundo.
Etimológicamente, la palabra retórica proviene del griego rhetoriké (sc. tékhne, "arte retórica"), deriva de la voz rhétor. Ésta voz es del grupo dialectal dorio, es el ≪"orador que habla en público", "orador político", propone acuerdos, adopta resoluciones o realiza pactos verbales llamados rétras (rhétrai)≫
La retórica surgió en una zona de habla doria, de la Grecia colonial (en Siracusa, Sicilia), ciudad independiente, gobernada por un tirano, durante el proceso de derrocamiento de éste, y la instauracion de la democracia. Esto conllevó la constitución de tribunales populares en los que los terratenientes podían recuperar las tierras usurpadas por el anterior régimen, mediante el pleito; y oradores públicos hablaban en consejos, asambleas, aconsejando o resolviendo cuestiones de la ciudadanía. Esto suscitó el interés por formarse para defender sus causas, y fue Córax quien estuvo a cargo de la enseñanza y elaboración del primer manual de retórica, al Téhkne (Arte).
La retórica de Siracusa pasó a Atenas a mediados del S. V a.C, siglo de Pericles. Junto con la "Reforma de Efialtes", que buscaba la democratización del proceso judicial, la democracia se instauró allí. Con esta reforma, los casos que no sean casos de homicidio, delitos religiosos, o los preparativos previos al proceso judicial, serán juzgados por un tribunal popular. De esta manera, surge así la necesidad de convencer al jurado de tal cual tesis, con el argumento de la verosimilitud, porque el pasado ya está muerto. Los argumentos eran del tipo psicológico, apelando al sentimiento, para conmover y persuadir, con "belleza expresiva". Es en este marco, el judicial, en el que sólo opera la lógica de la verosimilitud.
La reforma influyó además en otras oratorias, como la deliberativa o política y la epidíctica o de aparato.
La democratización de estos espacios implicó que el ciudadano común estuviera a la par de jueces y profesionales judiciales.
El orador, a través del discurso, debía:
a) simpatizar con el auditorio, mostrar un carácter democrático y políticamente correcto (el éthos, o "carácter");
b) excitar los sentimientos de los oyentes-jueces para conseguir un veredicto favorable (el páthos, o "pasión");
c) provocar admiración y el goce estético.
El buen orador era no sólo alguien capaz de resolver un pleito, sino también que le era facilitado el triunfo político, gracias a la retórica. Es así como la política, el poder, el goce estético, la libertad de expresión eran corrientes en la época, y todos conjugados e influidos por la retórica.
Los sofistas, con la reflexión sobre la realidad humana como ser social y la enseñanza de técnicas propias de la dimensión socio-política del hombre, junto con otros factores, iniciaron un "proceso de despolotización o eliminación del sentimiento de pertenencia a la ciudad-estado, transformó al ciudadano en individuo particular (idiótes), (...) en ciudadano del mundo (kosmo-polítes), que es como decir ciudadano de ninguna parte."
Los sofistas Gorgias y su discípulo Isócrates impulsaron la unión de la retórica y la poética, y la retórica en el ámbito escolar. Gorgias "asento sobre la base filosófica la esencia y objeto del enhechizador discurso poético". En sus discursos trata temas conocidos de forma didáctica, para demostrar una tesis sobre el arte.
Los sofistas además, practicaron dentro del género epidíctico, la retórica para impartir sus discursos, su filosofía y su arte.
En uno de sus discursos, El Encomio de Helena, Gorgias buscó demostrar que la realidad es inasible, y que el lenguaje, nuestro único asidero y forma de conocer y hacer conocer la realidad, sirve para persuadir y convencer a otros, manipulando la realidad mediante el logos, la palabra. La verdad queda "entendida como la reproducción de la realidad, puesto que con las palabras (...) se pueden construir mundos intermedios que reflejan no la realidad tal cual es (que nadie la conoce en su verdadera identidad ni la puede reconstruir ni transmitir cabalmente), sino la presunta realidad manipulada a nuestro gusto y a nuestra real gana o mejor propósito o intención."
En otro discurso ficticio, la Defensa de Palamedes, Gorgias demostró que todo es logos. Mediante el lenguaje, la presunta realidad se puede presentar como verosímil, ya que se trata de acontecimientos pasados, "de lo probable o verosímil (eikós), independientemente de la verdad."
De esta forma la retórica y la poética quedaron desligadas de la filosofía que busca la verdad. Convirtiéndose en formadora de oradores independientes de la verdad, que pretenden demostrar lo verosímil (no la verdad) la posibilidad del goce estético acercado a la poética y la verdad, y la incapacidad de aprehender la realidad a través de la palabra.
Isócrates, discípulo de Gorgias, escribe (cartas) y "enseña la retórica como disciplina fundamental de la formación humanística y política" en su propia escuela. Esta característica de la retórica de Isócrates tiene que ver con la falta de libertad política y de palabra en la época helenística, por lo que tuvo que transmitirse en la escuela. La retórica escolar tiene, además de las partes originarias de la retórica oral, política, invención, disposición y elocución (que se daban por sobreentendidas); dos partes más, memorización y ejecución del discurso.
Fuente:
López Eire, Antonio. Retórica clásica y teoría literaria moderna. Ed. Arco Libros, 1997. Págs. 13-26
http://books.google.com.ar/books?id=muSpAAAACAAJ&dq=retorica+clasica+y+teoria+literaria+moderna&lr=
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22 de julio de 2009
Retórica Clásica
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