Geoffrey Sampson define la escritura como un dispositivo para representar enunciados de una lengua hablada por medio de marcas permanentes y visibles, con variantes de la misma. La escritura no es ni parasitaria ni una transcripción de una lengua hablada. Hay formas de escritura que no dependen de la lengua oral.
Un sistema de escritura sirve para comunicar ideas de forma convencional. Entonces, la escritura puede ser entendida si los lectores aprendieron las convenciones para interpretarla.
Muchas lenguas habladas se escriben de manera diferente. La definición de escritura como sistema para representar la lengua oral puede aplicarse sólo si el dialecto escrito y el hablado están relacionados.
Hay formas de comunicación que pueden entenderse como escritura y no dependen de la lengua oral. Estos son los sistemas semasiográficos que indican las ideas directamente, en contraste con los sistemas glotográficos que proporcionan representaciones visibles de los enunciados de la lengua oral.